O donde meditar, o donde tomarse un café… ¡hasta te sorprenderá lo barato que te sale el menú! No es que estos sitios sean raros en sí; es que no son para cualquier momento…

Cualquier ciudad tiene sus rincones para pasar el tiempo de manera distinta. ¡Digamos que puede ser toda una experiencia lo que te proponemos! Lo que ocurre es que nunca pensamos en estos lugares diferentes a la hora de hacer planes; digamos que porque están hechos para momentos muy puntuales (o eso creemos) y no se nos ocurre pisarlos en ocasiones “menos especiales”.

Este post sólo es apto para gente que busca sensaciones sin salir de casa. ¡Lo avisamos!

1. EL CEMENTERIO

De todos los lugares extraños es el más típico: las pelis de Halloween tienen mucha culpa de esto. ¡El cementerio es el lugar más genial para pensar en la vida! (irónico ¿no?) pero es así: nunca tanto valor a la vida como cuando estamos cerca de la muerte. Además muchas lápidas están llenas de historia, pueden verse las diferentes elecciones, mensajes, los diferentes mármoles: ¡hasta aquí hay clases sociales! Por último, sobre todo los cementerios más modernos cuentan con cafeterías donde sirven hasta comida. ¿Una charla con la camarera o el camarero? ¡Seguro que tienen muchas historias que contar!

2. LA UNIVERSIDAD

Sus pasillos, sus tumulto, el olor a apuntes ya una eminente fiesta… ¿Por qué dejar de tener contacto con las diferentes facultades de nuestra ciudad? Volverás a sentirte joven, recordarás cómo eras y podrás hojear libros en la biblioteca. Lo bueno de una facultad es que nunca eres lo suficientemente mayor como para estar ahí (¡no es un instituto ni un colegio donde sospecharían de ti). La gente elige hacer carreras en diferentes etapas de su vida y el colegueo aquí es diferente. Podrás ver los carteles y las diferentes convocatorias de conciertos, campus cinema, etc. y beneficiarte de los super precios de la cafetería y el menú universitario. En el sur, un café te puede costar unos 80 céntimos ¿por qué irse a un bar de la calle?

3. LA CAFETERÍA DE UN HOSPITAL

La misma razón que te puede llevar a comer en una cafetería de una universidad, te puede llevar a acabar en un hospital. Algunos tienen unos menús de lujo. Ya sé, dirás “¡pero qué deprimente!” pero todo depende de cómo nos tomemos la experiencia. El desayuno es una buena hora: verás a todos los médicos y médicas con sus batas, hablando entre sí: a la gente que está haciendo prácticas hablando… Puede ser bastante curioso e incluso siempre hay algún personaje que se pasea a menudo por el entorno y que no viene a que le vean en ninguna cita médica. ¡Desayunos muy completos en los hospitales sí señor! Te creerás que estás en Hospital Central.

¡Éstas son algunas ideas!

¿Se te ocurre alguna más? Uy sí sí… ¡meterte en un polideportivo a disfrutar de un partido de baloncesto!