Cómo evitar mirar cara a cara a la Feria de Sevilla | Consejos de escapistas y anécdotas varias

Zombies en la Feria de Sevilla

Lo has intentando y todo pero la Feria de Abril no te gusta. Ni el albero, ni las casetas, ni los colores, ni los caballos, ni la sevillanas son lo tuyo… Sin embargo, vives en Sevilla o casualmente vas en esos días, ¿qué hacer para huir de la Feria? Expertas y expertos en escapatorias nos desvelan sus experiencias

El primero de ellos: RELAX. La Feria no es la Semana Santa y no se expande por todas las calles sevillanas. Estarás a salvo…

Apuesta por lo seguro

MÓNICA: “¡La feria es un infierno! Planes seguros: playa, reclusión en casa… Por suerte tiene un lado bueno y es que Sevilla está mucho más tranquila así que bares y restaurantes son más accesibles”.

Cena donde quieras sin reservar

ALEJANDRO: “A diferencia de la Semana Santa, la Feria de Sevilla se desarrolla en una zona aislada con lo que -teniendo en cuarentena a lo más gominoso y patillero de la sevillanía o se-villanía-, puedes pasear por el centro a ciertas horas con tranquilidad, y cenar casi donde quieras sin reservar”.

Los escarabajos son un claro ejemplo de sevillanos patillosos

¡”Es como cuando juegan Sevilla y Betis, que la ciudad es nuestra”!

Evita los transportes públicos por tu salud

CARLOS: “Yo intento no salir de la otra punta de sevilla (literalmente) al más puro estilo de una crisis post-apocaliptica. Evitar los transportes públicos (que son nidos infectos de zombies con olor a fino) y las grandes superficies a riesgo de tener que escuchar toda la discografÍa de Siempre Así mientras estas comprando el papel de cagar”.

Zombies en la Feria de Sevilla

No te fíes de las apariencias

MARÍA: “Lo malo de la feria es lo bueno de la feria: todo el mundo está feliz con el vinito y eso hace que veas a la gente como más guapa, más buenorra, diferente… La ropa también engaña mucho. Yo que tú me lo pensaría mucho antes de intentar ligar aquí e intentar continuar la cita fuera del contexto del farolillo. Os veréis despojados de vuestros ropajes, no seréis tan simpáticos y no estaréis rodeados de colores que os hagan creer que la vida es bonita. El batacazo puede ser mortal y la Calle del Infierno se te va a venir a la cabeza cuando le veas venir por la Avenida… Sin embargo, una relación tiene mucho futuro y perspectivas favorables si comienza en la periferia de la feria. Hablemos con claridad: sois frikis y ya tenéis, por eso, un 77,8% de compatibilidad. Muchas personas han conocido al amor de su vida odiando la Feria o festividades semejantes”.

Anécdota terrorífica. Cuentos para no dormir…

STELLA: “Trabajo  al lado de la feria. Para volver a casa tengo que coger el metro. Pues no se puede. El año pasado bajé al metro y pasaron tres trenes petados de gente vestidos de flamenco. Total, que después de de pagar el primer pique, volví a subir a la calle.

Dentro del Laberinto

Opté por montarme en un autobús que originariamente no va a la feria. Pero me equivoqué, le habían cambiando la ruta para ir recogiendo ferieros y pasar por toda la portada. Me llevé dos horas en el autobús y no podía hacer nada más que esperar a que el autobús me sacara de  allí…”.

Sois gente muy exagerada… ¡No os quejéis!

Vivir en la capital tiene muchas ventajas…

Saludos desde Cádiz…

*Todo lo hemos hecho con mucho humor. No te nos rebotes…

Lo que queremos saber es cómo huyes tú de la feria

¿Nos lo cuentas?